El gobernador del Banco Central de Irán ha asegurado que la tasa de crecimiento económico de la República Islámica es la más alta entre los países del Asia Occidental.
Durante su intervención en el Congreso Financiero del Banco de Rusia, celebrado este jueves en la ciudad portuaria rusa de San Petersburgo, Mohammad Reza Farzin ha afirmado que Irán registró una tasa de crecimiento económico del cinco por ciento en 2023, superior a la de muchos países, incluidos los Estados vecinos y regionales.
Ha destacado que esta cifra sitúa a Irán entre los 10 países del mundo con la tasa de crecimiento económico más alta.
Farzin también ha señalado que el país persa logró reducir la inflación más de dos veces en 2023, bajándola del 59 % al 23 %.
En otra parte de sus afirmaciones, ha indicado que Irán está observando de cerca la ley internacional contra el lavado de dinero.
Además, ha llamado a la creación de una organización intergubernamental dentro del marco del bloque BRICS de economías emergentes, similar al Grupo de Acción Financiera (GAFI), para combatir el lavado de dinero.
Farzin ha propuesto que el grupo de economías BRICS, del que Irán forma parte, cree un sistema de pago alternativo al servicio de mensajería financiera SWIFT.
¿Cómo Irán logró neutralizar las repercusiones de las sanciones?
Irán ha logrado mantener este notable crecimiento económico a pesar de las severas sanciones impuestas por Estados Unidos mediante políticas internas de diversificación económica, aumento de la producción industrial y agricultura, así como alianzas estratégicas con países como Rusia y China.
Además, ha implementado políticas de resistencia económica y desarrollo tecnológico interno para mitigar el impacto de las restricciones financieras internacionales.
El país persa también ha promovido la autosuficiencia tecnológica y ha incentivado la inversión doméstica para reducir su dependencia de los mercados internacionales afectados por las sanciones.
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