Bielorrusia promete tomar medidas de represalia apropiadas si se enfrenta a un ataque transfronterizo ucraniano como la incursión en la región rusa de Kursk.
“Estamos dispuestos a reaccionar de forma adecuada a provocaciones como la de Kursk”, enfatizó este viernes el jefe del Estado Mayor del Ejército bielorruso, Pável Muraveiko.
Citado por la agencia de Noticia estatal BELTA, subrayó que Minsk ha reforzado, en particular, sus defensas antiaéreas ante incursiones de drones en su espacio aéreo, añadiendo que “se han creado las condiciones necesarias para el despliegue de unidades con equipamiento pesado”.
“La situación en la frontera está bajo control”, aseguró.
El ministro de Defensa de Bielorrusia, Víktor Jrenin, aseguró hace unas horas que el país vecino Ucrania probablemente iniciará una provocación armada.
Rusia recupera el control de dos localidades en provincia de Kursk | HISPANTV
El Ejército ruso ha recuperado las localidades de Martinovka y Krupets, en la provincia de Kursk, de las tropas ucranianas, informa el Ministerio de Defensa ruso.
“Sigue existiendo una alta probabilidad de que se preparen y se lleven a cabo provocaciones armadas en nuestro territorio”, destacó el ministro, quien agregó que estas acciones pueden involucrar a “formaciones nacionalistas bielorrusas”.
El Ministerio de Defensa de Bielorrusia informó durante el fin de semana que el presidente Alexander Lukashenko decidió asegurar la frontera con Ucrania después de que un dron lanzado desde Kiev violara el espacio aéreo del país.
Lukashenko advirtió ayer que Minsk reaccionará “inmediatamente” si se violan las fronteras de Bielorrusia.
“No queremos una escalada, no queremos una guerra con la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), pero si ellos dan ese paso, no tendremos otra salida y no habrá líneas rojas”, aseguró el mandatario.
El pasado 6 de agosto el ejército ucraniano lanzó una ofensiva sorpresa contra la provincia rusa de Kursk. Los ataques ucranianos han causado hasta la fecha 12 civiles muertos y más de 120 heridos, entre ellos diez niños. Decenas de miles de civiles fueron desplazados por las hostilidades.
El jefe adjunto de la dirección general político militar del Ministerio de Defensa de Rusia, el mayor general Apti Alaudínov, dijo que Kiev implicó hasta 12 000 efectivos en esa incursión armada y que no deja de enviar refuerzos.
El presidente ruso, Vladímir Putin, juro una respuesta a la provocación de Kiev, al que acusó de disparar indiscriminadamente contra instalaciones civiles, y reafirmó que Rusia logrará todos los objetivos de su operación militar especial en Ucrania.
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