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La ministra argentina expresó que el rechazo al documento “lo celebran los criminales”.
La ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, arremetió contra los diputados que votaron para derogar el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) del presidente del país, Javier Milei, que destinó a la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) “fondos reservados” por un total de 100.000 millones de pesos (alrededor de 107,9 millones de dólares).
“El DNU de fondos para la SIDE es para cuidar a los argentinos. Los diputados que votaron junto al kirchnerismo (oposición) su rechazo, eligieron ponerse del lado de las mafias, los narcos y el terrorismo. ¡Ahora deberán hacerse cargo!“, escribió en su cuenta en X.
La importancia de este decreto radica, además, en que nutre de fondos fundamentales para fortalecer la Dirección Nacional de Inteligencia Criminal y así garantizar mayor seguridad a los argentinos. El rechazo al DNU lo celebran los criminales.
— Patricia Bullrich (@PatoBullrich) August 21, 2024
Según la funcionaria, el rechazo a ese decreto del mandatario argentino “lo celebran los criminales”.
De acuerdo con la ministra, la importancia de este decreto de Milei radica, además, en que nutre de fondos fundamentales para fortalecer a la Dirección Nacional de Inteligencia Criminal y así “garantizar mayor seguridad a los argentinos”.
“Amenazas narco, narcoterrorismo en Rosario, amenazas al presidente de la Nación, un país que sufrió dos atentados… y una SIDE desmantelada”, enfatizó Bullrich.
La sorpresa
El DNU fue derogado este miércoles en la Cámara de Diputados con 156 votos a favor, 52 en contra y seis abstenciones, en un debate exprés, que solo duró 40 minutos.
El proyecto rechazado ahora pasa al Senado, donde los legisladores tendrán la última palabra para validar o no el financiamiento de la SIDE que pretende ejecutar el Ejecutivo.
Durante la sesión, la sorpresa la dieron los diputados del partido Propuesta Republicana (PRO), que responden al expresidente Mauricio Macri, y votaron en contra del DNU. Hasta ahora, este movimiento formaba parte de las bancadas “dialoguistas” que actuaban como oficialistas porque avalaban todos los proyectos del Gobierno.
