Occidente, con la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) a la cabeza, maquinaron y financiaron el ataque a la región rusa de Kursk, considera Kremlin.
“Fue Occidente quien puso a la junta criminal al frente de Ucrania, los países de la OTAN bombearon a Kiev con armas, instructores militares, suministrando constantemente inteligencia y controlando las acciones de los neonazis. La operación en la región de Kursk también se planeó con la participación de la OTAN y los servicios especiales occidentales”, ha dicho este viernes el asesor del Kremlin, Nikolai Patrushev al periódico ruso Izvestia.
Patrushev también ha desenmascarado a Estados Unidos al decir que no son ciertas las declaraciones de que este no supo con antelación de la incursión ucraniana en Rusia ni que estuvo involucrado de manera alguna, según la agencia de noticias Reuters.
“Las declaraciones de los dirigentes estadounidenses de que no estuvieron involucrados en los crímenes de Kiev en la región de Kursk no son ciertas. Estados Unidos dice regularmente una cosa y hace otra. Sin su participación y apoyo directo, Kiev no se habría aventurado en territorio ruso”, ha manifestado el asesor ruso.
De acuerdo con Patrushev, el ataque a la región de Kursk se debió a la premonición del inminente colapso del régimen de Kiev.
Este mismo viernes, el Ministerio de Defensa de Rusia ha informado en Telegram de un ataque exitoso contra las Fuerzas Armadas de Ucrania en la zona fronteriza de Kursk en Rusia.
“Las tripulaciones de la aviación del ejército en helicópteros Mi-28NM atacaron por la noche una concentración de efectivos, vehículos blindados y equipos militares automovilísticos de las unidades de las Fuerzas Armadas de Ucrania en la zona fronteriza de la región de Kursk”, apostilla y añade que los informes de inteligencia sugieren que todos los objetivos especificados fueron destruidos.
El pasado 6 de agosto el Ejército ucraniano lanzó una ofensiva sorpresa contra la provincia de Kursk. Los ataques ucranianos han causado hasta la fecha 12 civiles muertos y más de 120 heridos, entre ellos diez niños. Decenas de miles de civiles fueron desplazados por las hostilidades.
El jefe adjunto de la dirección general político militar del Ministerio de Defensa de Rusia, el mayor general Apti Alaudínov, dijo que Kiev implicó hasta 12 000 efectivos en esa incursión armada y que no deja de enviar refuerzos.
El presidente ruso, Vladímir Putin, juro una respuesta a la provocación de Kiev, al que acusó de disparar indiscriminadamente contra instalaciones civiles, y reafirmó que Rusia logrará todos los objetivos de su operación militar especial en Ucrania.
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