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Un vuelo con 30 personas migrantes en situación administrativa irregular despegó este martes de la ciudad de Panamá, con destino a Medellín, Colombia, como parte de un programa acordado con EE.UU. para ponerle freno a los cruces por la peligrosa selva del Darién.
Washington se ofreció a financiar los vuelos de repatriación de migrantes, como parte de un acuerdo bilateral con Panamá, que ha alertado sobre el aumento del flujo de personas sin papeles que atraviesan ese territorio en su travesía hasta EE.UU.
Según EFE, la mayoría de los deportados son personas jóvenes y llegaron esposados al aeropuerto panameño Marcos A. Gelabert, más conocido como la terminal de Albrook. Desde allí, despegaron en un vuelo charter cerca de las 6:00 de la mañana, hora local.
