Ya considerada perdida para la eternidad, la Voyager 1 envió una respuesta sorprendente desde el espacio. A unos 24 mil millones de kilómetros de distancia, la sonda recibió el toque de la NASA y abrió una ventana de esperanza.
Último esfuerzo para comunicarse con la Voyager 1
A La sonda espacial Voyager 1 de la NASA pasó 46 años explorando los confines de nuestro sistema solar y la frontera del espacio interestelar. En los últimos meses, un error informático pareció significar el final de esta icónica misión. Sin embargo, el equipo mantiene la esperanza. Una nueva transmisión parece tener datos relevantes que podrían ayudar a los ingenieros a identificar y corregir el error.
A fines del año pasado, la Voyager 1 comenzó a enviar datos confusos a casa debido a un problema con su computadora del subsistema de datos de vuelo (FDS). La sonda se construyó con un FDS de respaldo, pero este dispositivo falló en 1981. El equipo del Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la NASA intentó varias soluciones, pero ninguna funcionó.
La Voyager 1 fue el primer objeto creado por el hombre que abandonó el sistema solar en 2013, seguida unos años más tarde por la Voyager 2. La comunicación se vuelve más difícil cada día que pasa a medida que aumenta el retraso entre las transmisiones y las respuestas. Cada vez que los ingenieros del JPL intentan comunicarse con la nave espacial Voyager, tienen que esperar 22,5 horas para que la señal llegue a la sonda y otras 22,5 horas para la respuesta. Esto ha hecho que sea aún más difícil resolver el problema de la corrupción de datos, que comenzó en noviembre pasado.
El 1 de marzo, el El equipo envió lo que se conoce como un comando "empujar" a la Voyager 1.. Esta operación indica a la sonda que ejecute diferentes secuencias en su paquete de software. La intención es evitar posibles datos corruptos que impidan que funcionen las secuencias normales.
Cuando llegó la respuesta el 3 de marzo, el equipo notó una señal inusual. El nuevo El bloque de datos no estaba en el formato estándar de la Voyager., por lo que el equipo inicialmente pensó que se trataba simplemente de basura aleatoria. Un ingeniero que trabajaba en la Red de Espacio Profundo de la agencia, comunicándose con la Voyager y otras misiones, se dio cuenta de que era importante.
Probe intenta todo por todo también
Según la NASA, el equipo confirmó el 10 de marzo que el La señal decodificada contenía una lectura completa de la memoria FDS. de la Voyager 1. Esto incluye una copia completa del código de computadora FDS y las variables activas que cambian según los comandos o el estado de la nave espacial. También hay una copia de los datos científicos y de ingeniería para su transmisión.
El equipo del JPL ahora tiene un posible camino a seguir. Los ingenieros compararon la nueva lectura del FDS con los datos enviados el año pasado antes del problema. Esto puede ayudar a identificar el problema y desarrollar una solución. Sin embargo, la NASA advierte que esto no sucederá de inmediato. Si estos datos apuntan a una solución, JPL quiere estar seguro antes de probarla. corrige una sonda a 24 mil millones de kilómetros de la Tierra.