El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, acusa a EE.UU. y sus aliados regionales, como Argentina, de intentar un golpe de Estado contra su gobierno.
En una ruda de prensa con medios nacionales e internacionales, Maduro deploró la negativa de Washington de reconocer su victoria electoral. Acusó a EE.UU. y el fascismo internacional de estar al frente de “un golpe de estado” para instalar su títere en Venezuela.
En esta misma línea, advirtió que los mandos de la oposición pretenden “hacer un atentado” en Caracas, en las manifestaciones convocadas por la líder opositora María Corina Machado, en rechazo a la reelección de Maduro como presidente. Según el mandatario, la derecha venezolana está financiada por el sionismo internacional.
El jefe de Estado venezolano agradeció además los esfuerzos de países como México, Colombia y Brasil para disipar la tensión que vive Venezuela tras los comicios presidenciales del 28 de julio.
Las declaraciones de Maduro se produjeron horas después de que el Consejo nacional Electoral ratificara por segunda vez su victoria con el 51,95 por ciento de los votos frente al 43,18 por ciento obtenido por el opositor Edmundo González.
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